jueves, 15 de febrero de 2007

QUE COSAS TAN RARAS DE LA VIDA...

Aquel día, iba caminando con unos amigos por la playa en Viña, cuando a lo lejos veo a un grupo de hombres que iban en dirección opuesta a la nuestra. Dentro de ese grupo había un muchacho alto, bastante guapo, con el cual, al momento de cruzarnos, cruzamos miradas y se produjo en mi una cosas indescriptible, es ese apretón de guata y rubor en las mejillas las que un poco reflejan el estado en que estaba, esa emoción y confusión del momento.
Pero una cosa si tenia muy clara, nunca lo volvería a ver, por lo que luego de un rato voltee para mirarlo por última vez, cuando él hace lo mismo, volviendo a encontrarse nuestras miradas, fueron sus ojos pardos y brillantes los que llamaron mi atención y los cuales nunca pude olvidar.

Ese fin de semana me quedé en Viña, mi idea era quedarme descansando, viendo alguna película, acostarme temprano, pero el sábado en la tarde me llamó la Gaby, para que la acompañara al cumpleaños de un amigo, porque ahí iba a estar el chico que le gustaba, yo sin muchas ganas de salir terminé aceptando, me di una ducha y me puse lo que primero encontré, no tenia ganas de fiesta ni mucha gente, pero todo sea por la amiga...

Una ves en la casa de Juan Pablo, estuvimos conversando, tomando algunos tragos, riéndonos y a ratos bailando, estuvo muy bueno, la verdad es que no me arrepentí de ir. Como a las 4 de la mañana miro la hora y le digo a la Gaby “ya es tarde, ¿vamos nos?”, con lo que ella accede, pero es ahí cuando el Nico nos dice “espérenme, yo las voy a dejar, sus casas me quedan a la pasá”...

Al día siguiente me desperté tarde y como en mi casa no había nada para comer salí a comprar algo para prepararme almuerzo, fue ahí, mientras caminaba que me acordé del niño al que había visto pocos días atrás en la playa y mientras pensaba en ese momento sonó mi celular, era la Gaby que me decía “a que no sabes quien me llamó”, la verdad es que no tenía muchas ganas de jugar a las adivinanzas a si que le dije que no se me ocurría. Me dijo “me llamó el Nico, me dijo que están en la casa del Juan Pablo con unos amigos y el primo del Juan Pablo, y van a ver las fotos del carrete de ayer, para que vayamos a verlas, que almorcemos allá con ellos”
Gran solución, ya no tenia que pensar en que almorzar ni tenía que cocinar, a si que nos juntamos con la Gaby y fuimos para allá.

Al tocar el timbre, se abre la puerta... “pasen, pasen” nos dice Juan Pablo “estamos haciendo unas pizzas” nosotras fuimos hasta la sala, cuando nos dice “les presento a Tomás, mi primo”
¡PLOP! ¿Su primo? Al darse vuelta veo al chico de la playa, valla sorpresa, la sangre me subió a las mejillas, las rodillas comenzaron a tambalearse y el corazón latiendo a mil. Él se acerca y nos dice “hola”, una sonrisa fue todo lo que salio de mis labios.

Que cosas tan raras de la vida, yo creyendo que nunca más lo iba a volver a ver y ahí estaba frente a mi conversando con todo el resto y comiendo pizza, luego de comer se levantaron todos y nos quedamos solos, él y yo, y me dice “yo ya te conocía, ya te había visto”.... “a claro, nos topamos en la playa”..., fue ahí, cuando el corazón se me quería salir por la boca ¿cómo podía ser que se acordara de ese momento?
“vamos a ver las fotos” gritó la voz del Nico desde la sala, nos levantamos y fuimos con todo el resto, jajaj que divertido fue ver las locuras que habíamos hecho la noche anterior, todos muertos de la risa.Al terminar las fotos me levante a lavar los platos y Tomás me dice “yo te ayudo”, mientras lavábamos toda la loza, conversamos de la vida y yo le dije “¿en verdad te acuerdas del día en que nos cruzamos en la playa?”, “claro que si” me dijo “ese día te veías hermosa y tus ojos, fue algo que llamó mucho mi atención”. El rubor volvió a subir a mis mejillas, justo cuando entra la Gaby y me dice “vamos nos, mañana tengo clases temprano”, “ok” fue todo lo que le dije y mirando a Tomás le pregunto “¿te voy a volver a ver?” , “claro que si” fuese respuesta y puso sus labios justo al término de los míos...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Así es la vida pu, siempre te van a pasar cosas parecidas, pero tienes que saber sorprenderte cada vez que te pasen... es leendo el encantamientos y en este caso, bien por Tomas jejeje
ke suerte la de el, toparse con una mujer a la ke viste, tes gustó y le gustaste... lo envidio
jejej
saludos, wen texto